Nunca Me Diste Nada

Nunca me diste nada
En el tiempo que estuvimos juntos.

Sólo me diste un par de caricias,
Me robaste mi desvelo
Me entregaste la melancolía,
Cuando te tenias que ir.

Una bolsa llena de sonrisas,
La llave para abrir tu caja de Pandora.
Me escribiste tu vida y tus miedos.

Tu aroma en la almohada que abrazas
Y hasta un sándwich para callar
Los ruidos de mi estómago.

Nunca me diste nada.

Me diste todo lo que podía desear
Porque nada es un vacío blanco
Como el que está en mi corazón
Porque ya no estás.

Me diste una camisa de fuerza
Con tus abrazos para sentirme seguro.
Me regalaste tu corazón plasmado
En cartas guardadas en recuerdos.

Los celos por miedo a perderme,
La puerta para seducir tus sentidos.

Tu alma y cuerpo en la habitación oscura,
Un chocolate de regalo,
Tus victorias y guerras,
Un almuerzo a las 12 en punto
Y un beso a tu rodilla.
Nunca me diste nada,

Me diste todo tu ser.
Me dejaste tu recuerdo,
Unas lágrimas de desolación,
Tu sombra en la avenida,
Y la palabra te extraño a mi vocabulario.

Mayor es el tiempo de olvidar,
Que de amar.

Mayor son los recuerdos que los momentos.
Más fue lo que tú me diste
Que lo que yo te ofrecí.
Nunca me diste nada
Me diste todo lo que podía querer,
Hasta la sensación de que hace faltaLa mitad de mi alma.